Estar soltero en momentos de nuestra vida es una opción, no debemos percibirlo como una situación impuesta o dolorosa, debemos disfrutar de la soltería, sentirnos solteros y beneficiarnos de las ventajas que ello nos ofrece, pero ¿qué ocurre cuando empezamos a pensar, a soñar, a desear tener una pareja? Aquí te dejamos las claves para que el camino de abrirte a conocer personas y poder iniciar una relación de pareja adecuada, te resulte más sencillo y, sobre todo, finalice con éxito:
- Antes de todo: reconocer que quiero tener pareja y para qué: no debemos usar las mismas técnicas si lo que busco es una relación de amistad, una persona para mantener una relación de pareja o una relación basada en el sexo.
- Identifica qué tipo de persona es adecuada para ti: este aspecto depende mucho de qué tipo de relación estás buscando, pero en este artículo nos centramos en la búsqueda de una relación de pareja: debes empezar por aceptar que la pareja ideal, la media naranja, el príncipe o la princesa de cuento, no existe. Lo siento. Debes estar predispuesto/a a conocer a hombres o mujeres reales, no ideales, pues al igual que tú cuentas con virtudes y defectos, los demás también. Así pues, antes de empezar a conocer gente, debes identificar cosas como qué necesitas o qué no va contigo en una relación de pareja. Es bueno que seas selectivo, pero no caigas en la exigencia, pues ésto te limitará muchísimo en tu objetivo.
- No compres una fachada: es importante que vayas más allá del mero físico, de los prejuicios o de que esa persona no sea a priori “tu tipo”. Atrévete a conocer a la persona, pues está demostrado que las parejas que hacen ésto último mantienen relaciones más sanas y estables que las que “compran la fachada”.
- No te pongas limitaciones: si te “bombardeas” con pensamientos negativos en cuanto a ti, en cuanto a tus pocas posibilidades para encontrar pareja o en cuanto a lo poco interesante que es la gente de tu ciudad, te estarás limitando tú solo y predisponiéndote a no encontrar finalmente pareja. Igualmente, libérate de los pretextos y excusas para ponerte a ello, como “no tengo tiempo”, “el trabajo me absorbe”: el buscar y mantener una relación de pareja exige de tiempo y dedicación, por lo que si no estás dispuesto a ello, puede que no sea tu momento de buscar pareja, no pasa nada, déjalo para más adelante.
- Muéstrate disponible: debemos atrevernos a salir. Recuerda, esa persona que buscas no va a venir a llamarte a tu puerta. Atrévete a sacar lo mejor de ti, tanto física como emocional y socialmente. No olvidemos que nos atraen las personas que cuidan su aspecto. Ésto es necesario, pero no suficiente, pues ¿nunca te ha ocurrido que ves a cierta persona que te atrae físicamente pero es de esas que “abre la boca y sube el pan”? una actitud, unos gestos, una conversación o, simplemente una sonrisa, pueden hacernos ver muy, pero que muy atractivos.
- Muévete en los sitios y con las personas adecuadas: cuando buscamos pareja, debemos ir a esos sitios donde es probable que pueda conocer al perfil de persona que busco. Es beneficioso, igualmente, que digamos a nuestros amigos/as que deseamos conocer a alguien con quien compartir nuestra vida, ya que ellos/as pueden ayudarnos presentándonos a gente o invitándonos a salidas o eventos.
- Una vez consigas hablar con esa persona que un principio te ha atraído, conócele: comienza a hablar de temas más generales y casuales y, poco a poco, puedes entrar a temas más personales como sus gustos o qué le motiva en la vida.
Es importante que sepas que ésto puede ser un proceso de ensayo-error, es decir, puede (y de hecho es lo lógico) que tengas que conocer a varias personas para llegar a la idónea para ti. Vemos, en consulta, numerosos casos que caen en el tremendo error de seguir el lema “mejor mal acompañado que solo”, pues las prisas o la obsesión por mantener una relación de pareja, les hace elegir mal y permanecer en una relación tóxica y en algunos casos hasta autodestructiva, aunque ese es otro tema del que podemos hablaros otro día…
Ya cuentas con todas claves, así que ya no tienes excusa para ponerte a ello. ¡Suerte!
Esmeralda Vazquez
(Psicologa del CENTRO INTEGRA)