, mientras la provincia sufre un servicio público postal en unas condiciones precarias, dados los recortes de plantilla que padece la mayoría de municipios gaditanos.
Para CSIF, es insultante que Correos venda a bombo y plantillo sus pruebas en la cordillera cantábrica, usando tecnología dron, para alcanzar zonas aisladas sin poner en peligro a los carteros, cuando en realidad, lo que se necesitan son más carteros, mejores oficinas y más medios físicos (vehículos de reparto, sobre todo) para prestar un servicio público verdaderamente aceptable. Hay que tener en cuenta que los carteros actualmente disponibles ya se encuentran sometidos a un gran estrés, ya que con los recortes de secciones de reparto, tienen que asumir mayor carga de trabajo.
De hecho, CSIF lleva denunciando la falta de personal en unidades de reparto ( como en Ubrique y Barbate, donde desde este verano, los contratos de jornada completa se han convertido en contratos de jornada parcial), cuando en estas fechas, precisamente, aumenta el número de envíos de paquetería (regalos navideños) y cartas (felicitaciones), además de tener en cuenta la campaña de elecciones generales, perjudicando así a los usuarios, que, como ocurrió en muchas ocasiones el año pasado, recibían sus correspondencias con excesivo retraso y obligándolos a desplazarse a oficinas de Correos de otras localidades cuando el reparto, por falta de personal o de vehículos, era imposible realizarlo a domicilio.
Desde CSIF, se pide a Correos que aprendan de sus errores para evitar situaciones de años anteriores, y que el servicio que presta al ciudadano, de lunes a viernes, con calidad, tal y como anuncia la empresa en sus campañas publicitarias.
CSIF quiere dejar claro su apoyo a los carteros rurales, apostando por la mejora de sus condiciones laborales y materiales, para que no haya servicios ni ciudadanos de primera y de segunda categoría.